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Entrevista con la dra. Wanda Pratnicka, terapeuta de los espíritus


 

Revista SF Yoga, San Francisco, septiembre de 2017 

Entrevista con la Dra. Wanda Pratnicka, terapeuta de los espíritus 

Por Kelly Krishna Dunn

Fue simplemente mágico no solo conocer a la Dra. Wanda Pratnicka en persona, sino también entrevistarla. Fue algo más allá de lo increíble. Ella ha ayudado a decenas de miles de personas por todo el mundo que han sufrido trastornos mentales y enfermedades físicas que se consideraban incurables. Wanda posee una habilidad única: es capaz de diagnosticar y expulsar a los entes espirituales o espíritus independientemente del lugar en el que se encuentre la persona. Durante más de cuarenta y cinco años ha estado comprometida con el campo de la psicología del alma, liberando a gente de dependencias entre ellos y los espíritus, purificándoles de esos entes, de la energía negativa e incluso de las maldiciones. Wanda es una conferenciante internacional, autora de numerosos libros. Me encanta su título, puesto que ella se autodenomina una Terapeuta para los Espíritus. He aquí lo que Wanda compartió con nosotros:

Me encanta cómo expresas que eres una terapeuta de las personas y de los espíritus. Es cierto que ambos necesitan los mismos cuidados, y la misma dosis de amor y comprensión.
Es muy común que seamos poseídos por espíritus que no se dieron cuenta de que habían muerto. Quizás estés atónito de que alguien pueda pasar por alto su propia muerte. Sin embargo, el momento del fallecimiento ocurre muy rápidamente, sin que tampoco se produzcan grandes cambios después de dejar el cuerpo físico. Es esta una cuestión que confunde a muchas almas, que a menudo habían tenido unas expectativas diferentes sobre la muerte. Incluso hay gente que, estando enferma y postrada en la cama, puede ignorar el momento de su fallecimiento. Llegan a creer que se han recobrado repentina y milagrosamente, porque se sienten mucho mejor y más ligeros. Vuelven con sus familias y quieren hablarles como solían hacerlo en vida, pero se encuentran con que nadie les responde. Después de un tiempo, estas almas empiezan a quedarse sin energía, y no hay mejor fuente de energía que otra persona viva. Alguien que ya esté corto de energía, como por ejemplo una persona físicamente enferma, emocionalmente exhausta o bajo la influencia de sustancias que alteran la percepción es el objetivo más fácil. Además, una persona que se desespera por la pérdida de un ser querido y que dice constantemente “quédate, no te vayas, no puedo vivir sin ti”, podría atraer con enorme rapidez a un alma que no haya hecho la transición al otro lado. El llanto y la añoranza son las esposas más fuertes que encadenan los muertos a los vivos. Tan solo una terapia apropiada, el amor y el entendimiento ayudan a aflojar los vínculos y le permiten al espíritu marcharse, especialmente cuando el motivo de la posesión es la falta de perdón, la añoranza o el deseo de venganza. Requiere una gran cantidad de paciencia y habilidad hacer que las dos partes entiendan cómo se atraen mutuamente y lo que necesitan aprender para continuar libre e independientemente con sus vidas.

¿Consideras que la mayoría de las enfermedades mentales y la falta de vivienda están causados por la presencia de espíritus en una persona?

Basándome en mis cuarenta y cinco años de investigaciones y en los miles de casos tratados, yo puedo afirmar con confianza que casi todas los enfermos mentales tienen espíritus que se les han adherido, a pesar de que estos no son siempre la causa de su enfermedad. En ocasiones, los espíritus se aprovechan de los enfermos mentales –son un objetivo fácil—y se adhieren: ¿Qué fue antes, el huevo o la gallina? En mi trabajo, podríamos decir, ¿qué fue antes, la enfermedad mental o los espíritus?

El caso de los sintecho es más complejo. Hay personas que acaban en las calles por una enfermedad mental (tienen espíritus adheridos que evitan que ellos actúen normalmente), adicciones, circunstancias financieras adversas o en ocasiones por propia elección. La falta de vivienda rara vez viene causada por la posesión. Normalmente, los problemas que podrían haber atraído a los espíritus existían ya, y como consecuencia la persona acabó sin hogar e incapaz de cuidarse de sí misma como es debido.

¿Es posible que los espíritus influyan en el comportamiento y hagan a las personas dependientes del alcohol, las drogas o bien otros muchos actos no deseados?

Después de la muerte del cuerpo físico, el alma sigue teniendo las mismas cualidades y adicciones que solía tener en vida. Por ejemplo, si una persona era alcohólica, seguiría sintiendo un fuerte deseo de beber después de morir. Obviamente, sabe que la única forma de satisfacer esa adicción es a través de otro ser humano, así que busca a alguien al que adherirse. Los bares y clubes nocturnos están llenos de espíritus que están a la espera de aprovecharse de una persona que esté bebiendo. Si eso ocurre, las personas pueden volverse adictas a las drogas, el alcohol, el sexo, el trabajo, el juego, los videojuegos y otros muchos hábitos negativos. Una persona que nunca antes haya experimentado adicciones, se vuelve de repente fuertemente dependiente y es incapaz de controlarse a sí misma. En la mayoría de los casos, después de que un espíritu haya sido expulsado, las personas se liberan de su adicción al instante; no sufren el síndrome de abstinencia ni sienten la necesidad de reincidir. Ocurre exactamente igual con otros comportamientos negativos como los siguientes: fobias, obsesiones y trastornos alimenticios.

¿Nos puede hablar sobre la Expulsión de Espíritus a Distancia? ¿Es algo similar a la forma artística del Reiki o el arte ancestral de curación Sat Nam Rasayan? 

No, no tiene nada que ver con el Reiki o el Sat Nam Rasayan. Al contrario, las personas víctimas de una posesión acuden a mí después de haber probado el Reiki u otras prácticas espirituales. Si yo intentase expulsar a los espíritus en la presencia de la persona poseída, le expondría tanto a ella como a mí misma al dolor y al sufrimiento, ya que la persona poseída y el espíritu se resistirían a mis tentativas. Esa es la razón primordial por la que expulso a los espíritus a distancia. Entonces puedo trabajar en un plano espiritual, donde no hay tiempo ni espacio, y puedo llegar hasta la persona y al espíritu que la posee como si estuviesen sentados delante de mío. En el transcurso del exorcismo, ninguno de ellos es consciente de cuándo lo voy a hacer exactamente. Ese es el motivo por el que consigo muy buenos resultados porque es indoloro y libre de estrés para todas las partes involucradas. Además, no es necesario perder tiempo ni dinero en viajar a verme, porque yo solamente necesito su nombre y apellido, dirección y fecha de nacimiento para conectarme a ellos y ser capaz de expulsarles a los espíritus.

¿Cuándo escribiste Conoce la Verdad y sé libre? ¿Canalizas el saber contenido en ese libro? ¿Es un libro eficaz que ayude con las experiencias traumáticas del pasado que siguen al fallecimiento de un ser querido?

El libro se publicó en 2012. Yo no he canalizado el saber contenido en ninguno de mis libros. Siempre tengo acceso al conocimiento más elevado, así que no me tengo que juntar con nadie para obtenerlo. Indudablemente, Conoce la Verdad y sé libre, así como mis otros cuatro libros, ayudan a curar las experiencias traumáticas de esta vida y las anteriores. Conoce la Verdad y sé libre ayuda especialmente a curar las heridas aparecidas después de la muerte de un ser querido. El sufrimiento de después de la pérdida de un ser querido suele venir de la falsa creencia de que lo hemos perdido para siempre. La muerte, sin embargo, no es más que franquear la puerta que nos conduce al siguiente aula, en la que seguimos aprendiendo. Es esa una de las razones por la que es importante que dejemos marchar al alma de la persona amada para que continúe con su viaje. 

¿Cómo puedes saber cuando alguien tiene un espíritu o un ente adherido?

No soyla única persona que puede reconocer que alguien tiene un ente/espíritu adherido a él o ella.Cualquiera puede hacerlo, cuando esté alrededor de la persona poseída. Lo primero es que no nos sentimos cómodos en su compañía.  Al contrario, nos sentimos enfermos, fatigados, fríos y repelidos por esta persona. Hasta el punto de que preferiríamos estar en otra parte. La gente cercana a la persona poseída puede advertir cambios en su comportamiento, o a veces incluso en su aspecto. A menudo se describe a las personas poseídas como si tuviesen “ojos con una mirada diabólica”. Una persona poseída evita a los demás o se vuelve hostil.  Otros síntomas de la posesión son: falta de energía, depresión, ansiedad, falta de control sobre las emociones, frecuentes estallidos de ira, dolores de cabeza y de estómago frecuentes, cambios de humor, adicciones, pensamientos suicidas, problemas en las relaciones, etc. Hay muchos más síntomas adicionales que describo con detalle en mi primer libro, “Poseídos por los Espíritus: Los exorcismos en el siglo XXI". Según un estudio reciente, una de cada seis personas tiene un ente/ espíritu que se le ha adherido. Por tanto, se trata de un problema mucho más común de lo que pensamos. La adhesión de un ente es una de las formas más desconocidas, controvertidas, ignoradas e incomprendidas de enfermedad espiritual y energética. 

¿Cuál sería el procedimiento para ahuyentar a los entes no deseados que merodean acechantes por tu campo electromagnético?

Debido a que el mundo astral penetra el físico, los espíritus pueden están por todas partes. Si no los husmeamos, estamos a salvo, y los espíritus no nos pueden alcanzar gracias a nuestro aura protectora. Sin embargo, si rompemos las Leyes Universales y atraemos a los espíritus de una forma o de otra, al mismo tiempo estamos atrayendo problemas que a veces se transforman en auténticas tragedias. Cuando eso ocurre, solo una purificación de los espíritus realizada por alguien como yo, una exorcista, puede servir de ayuda, porque la persona poseída no es capaz de elevar sus vibraciones en el plano astral, lo que significa que no es capaz de librarse de los espíritus por sí misma.