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Las confesiones del exorcista secular, Wanda Pratnicka


 

Cuarta dimensión, octubre de 2004  

 

Purifico a la gente de las energías negativas, anatemas, espíritus, los cuales se pegaron o "prendieron" a ella y no le permiten funcionar normalmente... Purifico también a casas poseídas o tales en que se quedó espíritu del propietario anterior y no permite venderlas o alquiler...

De costumbre actúo a distancia, porque ocurre que es más rápido y eficaz, puesto que espíritu no sabe - de donde viene el "ataque" y quién por ejemplo le está despidiendo del cuerpo en el cual entró o de casa en la que hace desorden. 

La distancia no importa. Me llama por teléfono gente de Australia, América, Asia, porque ayudé a sus conocidos o parientes. Lo más a menudo madres, esposas o padres piden por ayuda para sus niños o parejas.

Sin embargo ocurre también que los niños se dirigen por ayuda para padres, quienes por ejemplo abusan del alcohol... Muy a menudo esto es causado por "invasión" de un espíritu. Igualmente sucede en casos de ataque de furia, maltratamiento a familia y también enfermedades reconocidas como esquizofrenia o... insomnio.

Para empezar a trabajar necesito tener lo más datos posible de la persona de la cual es preciso volar en socorro. Por eso pido a los cercanos por comunicar: nombre y apellido, fecha y lugar de nacimiento y lugar de residencia. Entonces "agarro" el contacto con esa persona y verifico - de mi propia manera - si en realidad molesta o cizana una "energía extraña" o hay también causas de naturaleza más prozaica. 

Los espíritus normales - generalmente los que no tienen consciencia de que su cuerpo está muerto ya, porque murieron repentinamente o morían entorpecidos por remedios anodinos - cuando se les explica que su tiempo en la tierra ya se terminó y deberían ir más arriba - se van facilmente.

En cambio, los espíritus de personas malditos durante la vida - están metidos en viviendas o casas como si fueran encarcelados alla y cuesta mucho más trabajo reenviarles allá donde después de la muerte del cuerpo.

A veces la gente pide por purificarla, pero no reenviar el espíritu a la Luz, sino quedarle en casa para que lo guarde... Sin embargo hay que tener en cuenta que incluso "espíritus amistosos de natural" pueden ser un grande fastidio en casa... A menudo "limpian" vivienda, esconden objetos esparcidos, dezplazan equipos. 

Los espíritus demoníacos pueden ser reconocidos por un olor desagradable. Cuanto más demoníaco espíritu, tanto más hede en casa, aunque no se puede encontrar ni menor causa para esto. La gente arranca los papeles, quita suelos, desmonta paredes, pero desagradable, obstinado olor - no cede, en cambio, entre la gente de casa empiezan a crecer malentendidos, se aumente nivel de agresión... a veces se efectuan pruebas de suicidio u otras grandes tragedias. 

El hecho más y más frecuente es una vuelta de espíritus de esposos y esposas difuntos. Acuden a mí mujeres arañadas, con heridas en caras, cuello, espalda, pecho.

Cuando pregunto (porque puedo verlo a través del vestido) - si es usted violada, lo más a menudo estallan de llanto y cuentan lo, contra que luchan por meses e incluso a veces por años.

La cosa no es tan grave cuando el alma de esposo llega sola. Sin embargo a menudo junto a ella se adentran a vivienda otras energías semejantes a él. Si durante la vida tal individuo era por ejemplo un alcohólico, también después de la muerte, su alma que no se purificó es propensa a tal compañía astral. 

Las mujeres atormentadas de esta manera no saben mucho dónde buscar ayuda. A menudo sus confesiones el médico psiqiatra considera como quimeras, obsesiones o fantasias sexuales. Logré ayudar a mucha gente tal atormentada y despedir a almas de sus maridos, amantes o conocidos.

Hace poco se dirigó a mí una mujer pidiendome por purificar a su hijo drogadicto. Era convencida de que dentro de su cuerpo se estableció un espíritu extraño. El chico se comportaba agresivamente, se le cambiaba la voz, expresión del rostro y color de ojos.

Empezé a trabajar con él a distancia y bastante pronto logré reenviar a la Luz un drogadicto viejo, el cual no sabía que tras así llamado "disparo de oro" el cuerpo suyo desde hace tiempo descansa en la tumba.

El chico se cambió irreconocible y dentro de poco me trajo unas personas de su compañía de drogadictos, a las cuales también logré ayudar. 

Esto siempre me alegra mucho...

Lo más tiempo, porque casi 8 meses luchaba con un espíritu de abuelo quien entraba en cuerpo de su nieta. Alina era estudiante de psicología, por el aspecto, un dulce ángelo rubio. Mientras tanto sabía inespedaramente hacer una camorra gamberra en la calle, emborracharse, echar maldiciones como un cochero. 

Lo que reflexionaba a sus conocidos - era lenguaje el cual utilizaba entonces. Era no solo vulgar, agresiva sino también se expresaba como un hombre.

Luego quería cambiar el sexo, comenzó a seducir a su amiga de residencia estudiantil. Como resultó, su abuelo era cargado de una anatema que le tenía encarcelado en la tierra. Espíritu quería realizarse, vivir, a través de su querida hija. 

Solamente cuando le expliqué a él, hice conciente a su alma que destruía vida de chica tan hermosa y delicada, que le desgraciaría, si cambiara el sexo. ¿Por qué cuál mujer querré tener como pareja un hombre pequeñito de estatura 156 cm? Entonces, como si se sacudiera y permitó llevarse más Arriba...

Se puede evitar muchos dramas si la gente sabría dónde buscar ayuda. Opino que en cada parroquia debería ser un cura quién sabe realizar exorcismos. 

Mí actividad denomino de purificar y trasladar a las almas, pero no protesto si alguien me llama exorcista, puesto que lo que hago es un equivalente secular de las prácticas de iglesia.